martes, septiembre 16, 2014

Conferencia. Fossils from Gabon show early steps toward multicellularity and the oldest biodiversity

Informaros que el  próximo jueves 17 de Septiembre a las 12:30 en el Salón de Actos del  Instituto Andaluz de Ciencias de la Tierra de la Universidad de Granada el Profesor Abderrazak El Albani (Institut de chimie des milieux et matériaux in Poitiers -CNRS/Université de Poitiers)  impartirá la conferencia:

Fossils from Gabon show early steps toward multicellularity and the oldest biodiversity 2.1 billion years ago: A new chapter of Life history

Os dejamos un breve resumen:

“The discovery in 2010 of 250 fossils of complex multicellular organisms dating back 2.1 billion years in a sedimentary bed close to Franceville, in Gabon, drastically changed the scenario of the history of life on Earth. Until then, the oldest known fossils of complex organisms were 600 million years old (Vendobionta from Ediacara in Australia) and it was commonly accepted that, before that period, life on our planet was exclusively made up of unicellular organisms (bacteria, unicellular algae, etc.). With the Franceville discovery, complex life forms made a leap of 1.5 billion years back in time. Animals appeared a little more than half a billion years ago, changing the Earth’s biosphere forever. Predation, burrowing, and all other modes of life available to animals pushed evolution in numerous directions. This was the “Cambrian explosion”.

Animals were not the first, nor the only, multicellular macro-organisms, however. Scattered fossil occurrences show that large individuals using cells as building blocks appeared a number of times during the latter part of the Proterozoic Eon (2.5 to 0.54 billion years ago). Some of these early lineages (such as red or green algae) still exist.

Reported in Nature Magazine in 2010 and in Plos One in June 2014 is the recent discovery of centimeter-sized fossils from black shales in Gabon represented by more than 450 specimens. These macro-fossils reveal that large organisms growing in a coordinated manner (a prerequisite for multicellularity) go back to at least 2.1 billion years ago, almost to the beginning of the Proterozoic Eon. The fossils were investigated by an international team of scientists, led by Pr. A. El Albani of the University of Poitiers, France.

On the surface, the fossils resemble irregularly shaped cookies with split edges and a lumpy interior. Viewed in a high-resolution X-ray tomograph (a kind of CAT scan) they reveal different shape and size exhibiting elongate, circular and a sheet-like structure with a pervading radial fabric and a neat pattern of central folds. This structure is too complex to be a product of inorganic processes, and further analyses confirmed that the carbon in the fossilized tissue was assembled by biological processes, also that the iron-sulfide mineral pyrite replacing most of the tissue had been formed by bacteria “breathing” sulfate, rather than oxygen, when decomposing the organisms in the sediment. Finally, the organisms were shown to have lived in shallow marine waters with free oxygen.

Large size generally signifies an energy-demanding way of life. Breathing oxygen, as we do, is a much more efficient way of obtaining energy than other physiological processes. The Proterozoic Eon saw two major events of oxygen build-up in the atmosphere (and, thereby, in the oceans); the first near the beginning of the Eon, 2.45–2.2 billion years ago, and the second at the end, 0.8–0.54 billion years ago. The evolution of the Gabon fossils, representing an early step toward large-sized multicellularity, may have become possible by the first boost in oxygen, whereas the “Cambrian explosion” could have been fuelled by the second. Why it took around 1.5 billion years for the multicellular organisms to take over is currently one of the great unsolved mysteries in the history of the biosphere”.

lunes, septiembre 15, 2014

Patrones de extinciones de la Herpetofauna en el Pleistoceno


En el recientemente celebrado el XVII congreso de la UISSP 2014 que se ha celebrado en Burgos nuestros aragosaureros presentaron casi una veintena de comunicaciones. Hay que destacar que se trata del congreso más importante sobre la Prehistoria que se celebra en el mundo. Además Gloria Cuenca-Bescós, Universidad de Zaragoza, Juan Manuel López-García, Universita di Ferrara, Hugues-A. Blain, IPHES organizaron una sesión titulada B2-Biocronología, bioestratigrafía y paleoecología del cuaternario europeo (B2PQUE)(B2- Biochronology, biostratigraphy and paleoecology of the Quaternary of Europe (B2PQUE).

Los fósiles de pequeños vertebrados son las mejores herramientas para la biocronología, bioestratigrafía y reconstrucciones paleoecológicas del Cuaternario continental del continente europeo. Europa ha sido la vanguardia de la bioestratigrafía y paleoecología de pequeños mamíferos desde los primeros trabajos de los paleontólogos de finales del siglo XIX y principios del XX como Cuvier, Major, Hinton, Stehlin, Schaub ... En la Península Ibérica , el trabajo sistemático de Miquel Crusafont y Nieves López Martínez sentó las bases de la bioestratigrafía moderna basada en la correlación biostratigráfica con pequeños mamíferos durante el Cenozoico. Ambos cooperaron activamente con nuestros colegas del este, Crusafont organizó las reuniones del Oeste, encuentros con el Este en Sabadell (como el profesor Kahlke hizo a su vez en Weimar , Alemania), y Nieves utilizaba las correlaciones paneuropeas de los húngaros, Janossy, checos, Fejfar, alemanes "del otro lado del muro", Heinrich y franceses, Mein, entre otros, como marco bioestratigráfico para las localidades de la Península.

Durante las últimas tres décadas, los estudios de pequeños vertebrados relacionadas con importantes yacimientos cuaternarios tanto arqueológicos como paleontológicos en Europa se ha incrementado notablemente. Los jóvenes científicos que se iniciaron en la década de 1990, con su trabajo han sentado las bases para la formación de la nueva generación de especialistas españoles en microfauna y formar a su vez a nuevos doctorandos, que continúan la labor iniciada por nuestros predecesores, no sólo estudiando e integrando en la biocronología, bioestratigrafía y paleoecologia paneuropea moderna a los microvertebrados de España, sino también de otros países europeos como Portugal, Italia, Francia, Alemania, Polonia, Rusia y el norte de África, así como paises del otro lado del Atlántico como México. Nuestros objetivos a largo plazo son: la busqueda de nuevos proyectos y la consolidación de los proyectos en curso. El objetivo de la sesión es el encuentro entre los investigadores de microfauna de todo el mundo, el tiempo para la discusión de las ideas, la metodología y los resultados de nuestros respectivos proyectos.

Para ello, una sesión como el B2- Biocronología , bioestratigrafía y paleoecología del Cuaternario de Europa, será una buena oportunidad para comunicarse. La correlación bioestratigráfica, la comparación paleoecológica y la biocronología del Cuaternario en Europa, necesita de la participación de un gran número de investigadores, que trabajan en diferentes regiones geográficas con el fin de tener la posibilidad de comparar entre los contenidos de la fauna de diferentes secuencias estratigráficas de diferentes edades y de diferentes lugares.

 Hugues-A. Blain presento una comunicación en esta sesión titulada Geographical and Chronological pattern of the herpetofaunal pleistocene extinctions in the iberian península: A biochronological tool? Nos ha enviado un resumen que os adjuntamos

Patrones geográficos y cronológicos de las extinciones de la herpetofauna durante el Pleistoceno en la Península ibérica: ¿una herramienta biocronológica?

Las faunas de anfibios y reptiles de Europa del Oeste son conocidas por haberse hecho menos diversas a lo largo del tiempo y en particular quedaron bastante empobrecidas durante el Plioceno y el principio del Pleistoceno inferior, muy probablemente en relación con la intensificación de las pulsaciones glaciales en el hemisferio norte. Al final del Rusciniense (ca. 3,2 Ma) las familias con afinidad tropical como los Varanidos, los Aniliidae s.l. y las cobras (Elapidae) desaparecen de la Península ibérica y del Sur de Francia. A finales del Villanyiense inferior (ca. 2,6 Ma) algunos geckos, el eslizón Trachylepis, y ciertas serpientes como los serpientes ciegas (escolecofidios), boas (Erycinae) y víboras de grandes tamaños desaparecen de Europa del Oeste; y finalmente los últimos taxones “exóticos” en desaparecer son los agamidos, el anguido Dopasia y el sapo verde  (Bufo viridis sensu lato) al final del Pleistoceno inferior (ca. 1,3-1,1 Ma) en el Sureste de la Península ibérica en yacimientos como Barranco León (Granada), Almenara-Casablanca-3 (Castellon) y Quibas y Cueva Victoria (Murcia).

 A parte del puro interés paleontológico, estas desapariciones también pueden ser útiles a la hora de identificar ciertos patrones geográficos y/o cronológicos en el marco de la Península ibérica. La regresión progresiva de estas faunas hacia el Sureste de la Península ibérica esta relacionada con la evolución del clima hacia un enfriamiento progresivo a lo largo del Pleistoceno, pero también estos eventos permiten proponer unos criterios biocronológicos para la Península ibérica con 2 principales fases de desapariciones una que coincide con la inversión paleomagnética de Olduwai (ca. 2,0 Ma) y la otra con la de Jaramillo (ca 1,0 Ma).

Estudiando un leopardo del Pleistoceno superior de Valencia

 La semana pasada el aragosaurero Víctor Sauqué realizó una estancia en el Museu de Prehistòria de València para colaborar en el estudio de uno de los esqueletos de leopardos fósil mejor conservados de Europa, dicho resto fue recuperado por miembros del Grup d’Espeleologia l’Avern en 2013 en la cavidad de Avenc de Joan Guitón (Valencia) a 150m de profundidad. 
El equipo de investigación dirigido por Alfred Sanchis (Museu de Prehistòria de València) está formado por de miembros de la Universidad de Oviedo, Universidad de Zaragoza así como por los espeleólogos del Grup d’Espeleologia l’Avern.

Los leopardos debido a sus hábitos solitarios y territoriales no son un elemento muy abundante en las asociaciones paleontológicas, por ello este hallazgo es realmente excepcional, de hecho hasta el momento solo se conocía otro esqueleto en Europa, el hallado en la cavidad de Vjetrenica (Bosnia). 

El estudio de este esqueleto ha permitido a los investigadores revisar la sistemática y realizar un estudio biométrico, dicho estudio ha puesto de manifiesto las semejanzas de este esqueleto con otros restos peninsulares como los procedentes de los Rincones (Zaragoza),Torrejones (Guadalajara), Zafarraya (Malaga) Allekoaitze (Guipúzcoa) y  Manga Larga (Portugal). Los leopardos de la Península Ibérica durante el Pleistoceno Superior presentaban unas características que nos permiten diferenciarlos de los leopardos actuales y asignarlos al leopardo de las cavernas “European Ice Age Leopard”. En los próximos meses los investigadores esperan que este estudio salga a la luz mediante su publicación en una revista científica.

Desde el grupo Aragosarurus deseamos que este sea solo el comienzo de una larga lista de colaboraciones con el Museu de Prehistòria de València